El Principito y el Jardín del Tiempo
Una tarde, el Principito volvió a visitar la Tierra. Caminó largo rato hasta llegar a un jardín lleno de flores, pero no eran rosas: eran margaritas, tulipanes, lavandas y pequeños pensamientos.
Se detuvo frente a una mujer que cuidaba las plantas con paciencia infinita.
—Hola —dijo el Principito—. ¿Por qué riegas tantas flores distintas?
La mujer sonrió. —Porque cada una florece a su ritmo. Algunas ya se abren al sol, otras esperan su momento.
Me recuerdan a las personas: cada una tiene su propio tiempo para florecer.
El Principito se sentó a su lado. —Yo tenía una rosa —susurró—. Era muy exigente, pero también muy hermosa.
A veces la echo de menos.
—Entonces cuídala en tu memoria —respondió la mujer—. Las flores que amamos no mueren, solo cambian de jardín.
El Principito pensó en su pequeño planeta, en los volcanes, en su rosa, en el zorro que le había enseñado a “domesticar”.
—¿Y tú? —preguntó— ¿A quién extrañas?
—A muchos —dijo ella, mirando el cielo—. Pero aprendí que el amor no se acaba, se transforma en recuerdos, en gestos, en historias.
Es como la savia de los árboles: invisible, pero siempre presente.
El Principito se quedó en silencio. Luego tomó una semilla del suelo y la guardó en su bolsillo.
—¿Qué harás con ella? —preguntó la mujer.
—La llevaré a mi planeta. Quiero plantar algo nuevo.
Ella asintió. —Eso es lo más hermoso de crecer: poder sembrar lo que aprendimos, aunque sea en otro lugar.
Antes de partir, el Principito miró al jardín una vez más.
Cada flor parecía saludarlo con una leve inclinación, como si entendieran que él también había aprendido algo.
Esa noche, mientras viajaba entre las estrellas, el Principito pensó que quizás el secreto del tiempo no estaba en los relojes, sino en el corazón: en seguir cuidando lo que amamos, en cada etapa, sin miedo a cambiar de estación.
🌻 Porque todos, en algún momento, somos jardineros del tiempo.
Y las flores que cuidamos —amigos, recuerdos, amores— son las que mantienen vivo nuestro pequeño planeta interior.
Recuperado por Círculo Senior.
Conectando generaciones, experiencias y nuevas formas de florecer. 🌸